lunes, 8 de marzo de 2010

Obituario


Dios escuchó mis plegarias, se llevó la piedra que molestaba en mi zapato. Tal vez piensan que desear la muerte de algo o alguien es malo, pero no, no deseé la muerte de nadie.

Una de estas noches sin estrellas, hice contacto con el Padre creador y le pedí entre lágrimas por una señal, fuese cual fuese, cualquier hecho que me sacara del limbo donde habían ido a parar mis sentimientos. Dicen que cuando Dios borra es porque escribirá algo derecho.

Lo cierto es que ofrecí a un egoísta afortunado caminar a mi lado…le concedí un cofre lleno de maravillas, ese tesoro que todos codician pero que pocos encuentran. Y es que el reto no es conseguirlo, sino mantenerlo.

Pero fue tanta la grandeza de lo que me atreví a regalarle, que no soportó el peso y huyó cual infeliz cobarde sin escrúpulos ni visiones futuras. Sé que cuando continúe caminando a solas, en el mundo de los muertos, se lamentará ya no tener donde apoyarse para descansar después de tanto andar, y se detendrá a esperar que el viento se lo lleve, así como vuelan las hojas secas y marchitas de los árboles en invierno.

Hoy publico un obituario atrasado, anuncio el deceso de un personaje inventado. Un personaje que recibió de mi todo lo que humana y espiritualmente puede entregarse desinteresadamente a alguien. El muerto que camina hoy, es eso para mí, un muerto sin alma y con el corazón descompuesto.

En lo que a mí respecta, estoy viva y consciente de ello, esperando por un ser de luz capaz de aceptar con humildad todo lo que tengo para dar, eso que llevó a la tumba a un desventurado que hoy es fantasma.

Q. E. P. D.

No hay comentarios: